13 consejos básicos para la gestión de un restaurante

por | 13 mayo, 2014

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El llevar adelante un restaurante puede resultar una tarea a veces complicada. El día a día muchas veces nos hace perder la perspectiva, por lo que de vez en cuando es recomendable detenerse un instante y pensar en el negocio. Hacer un repaso mental de los principales aspectos del negocio y ver en qué está fallando o si hay capacidad de mejora en alguno de sus ámbitos.

La base principal del restaurante es que haya un liderazgo firme que sepa guiar a los trabajadores, pero que igualmente piense constántemente cómo es posible mejorar el restaurante.

A continuación ofrecemos 13 consejos o aspectos básicos que debe revisar frecuentemente para una mejora continúa de su local.

1. Cuenta con el equipo humano adecuado

Todos y cada uno de los empleados del restaurante juegan un papel clave en el funcionamiento de la empresa, desde los encargados de lavar los platos a los cocineros, pasando por los camareros. Es importante estudiar bien a quién va a contratar para su negocio y qué responsabilidades y funciones van a realizar. ¿Confías en todos tus empleados?

2. Mantén bajo control el inventario de alimentos y los desperdicios de alimentos

Un registro de los alimentos que se compran y los que se consumen es la base para un buen funcionamiento de la cocina. No sólo nos permitirá evitar que los alimentos se pongan malos y se desperdicien, si no también optimizar las compras. Ambos nos permitirá ahorrar costes. ¿Saber cual es tu nivel de inventario de tu restaurante ahora mismo?

3. Toma decisiones de compra adecuadas

Las compras y pedidos se deben hacer con planificación. Esto nos permitirá realizar compras inteligente en base a los mejores precios, tendencias y cualquier otra información que considere importante a tener en cuenta para tomar la decisión. Unas compras sobre la marcha probablemente no se convertirán en compras óptimas.

4. Predica con el ejemplo

Un líder tiene que ser el ejemplo del tipo de actitud que quiere en sus empleados. Hay que predicar con el ejemplo para que el resto de empleados sigan los pasos.

5. Está siempre visible

La persona responsable del restaurante debe estar siempre presente en el restaurante. Está siempre disponible y accesible, que se le vea implicada en el proyecto como uno más.

6. Crea un ambiente de trabajo positivo

Tal vez una de las tareas más difíciles de conseguir. El lugar de trabajo tiene que ser un entorno positivo, ayuda a crear buenas dinámicas entre los empleados, confianza entre ellos. Mantener un nivel de energía optimista puede facilitar la motivación de los empleados, lo que se traducirá en un alto desempeño de estos.

7. Disciplina y coherencia para todos los trabajadores

Todos tus empleados deben tener el mismo trato. Establece unas políticas que se aplicarán a todo el mundo, sin distinción. Evita favoritismo para reducir posible problemas.

8. Procura dejar los problemas personales fuera del trabajo

Aunque sea difícil, intenta dejar tus dramas personales fuera del restaurante, y sobre todo aleja esos problemas de los empleados y de los clientes. No aporta nada arrastrar esos problemas y que lleguen a terceros.

9. Invierte en ti mismo

Siempre intenta mejorar como administrador del restaurante, invierte recursos en tu propio desarrollo profesional.

10. Invierte en tu personal

Asegúrate siempre de que tus empleados reciben la formación adecuada y más actualizada para realizar su trabajo. Facilítales herramientas y el conocimiento adecuado. Será un trabajo duro por la alta rotación con la que se trabaja en el sector de la hostelería, pero si entrena y motiva a sus empleados obtendrá sus frutos. Puede incluso plantearse aplicar un sistema de recompensa de los empleados, pero cuidado, en el caso de España no siempre funcionan los mismos sistemas de recompensa que se aplican en el extranjero.

11. Demuestra que te preocupas por tus empleados

Mostrarse accesible y cercano a los empleados, empatizar con ellos, les hará a sentirse más a gusto, pues se sentirán comprendidos. Esto ayudará también a crear relaciones más fuerte con tus empleados.

12. Toma descansos de vez en cuando

El nivel de actividad en la hostelería suele ser agotador, lo que conduce a un alto nivel de estrés. Evita quemarte a ti y a tus empleados. Planifica descansos para poder priorizar las tareas.

13. Pide ayuda cuando la necesites

Delegar responsabilidades no es algo negativo. Cede el control a tus empleados, confía en ellos, esto no solo te liberará carga que poder dedicar a otros aspectos que requieran de más importancia, sino que además fortalecerá tu relación los trabajadores.

El listado se podría completar con muchos otros aspectos a tener en cuenta. No obstante, aquí os hemos ofrecido algunas ideas en las que conviene recapacitar de vez en cuando. A veces el mal funcionamiento de un restaurante no se debe solo a una falta de marketing o mala comida.

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