Un comportamiento habitual en los buffets libre es llenar los platos excesivamente. Demasiada comida que al final no se acaba comiendo el cliente y resulta totalmente desperdiciada, con el posterior sentimiento de culpabilidad.
El chef de un restaurante de Suiza quiere evitar malgastar tanta comida obligando a un pago adicional en caso de no terminar el plato de comida.
La controvertida medida ha sido puesta en funcionamiento por Giovanni Tafuro, el chef del restaurante Patrizietta, en Losone, Suiza. Movido por tanto malgasto de comida, ha decidido imponer una cuota adicional de 5 francos (unos 4 €) sobre aquellos clientes que no terminen sus platos con toda la comida que se sirvieron. Una cantidad considerable teniendo en cuenta que el buffet cuesta 12 francos (9,8 €), es decir, sería un recargo de algo más del 40%.
Quería mandar un mensaje fuerte. Me ponía enfermo ver tanta comida que era desperdiciada.
Esta medida no es la primera en este campo. Ya en el 2012, un buffet chino en Reino Unido entró en polémica por cobrar a una mujer y sus hijos un total de 20 libras (24,5 €) por dejarse en sus platos dos aros de cebolla, un trozo de pan de gambas y un rollo de primavera.
Esta práctica no está exenta de polémica, pues como en el caso del buffet chino, si es una cuantía fija con independencia de cuanta cantidad de comida se deje. Vista desde el otro lado, es una medida que llama al autocontrol del cliente, lo que además permitiría un ahorro en costes.
Vía información | 20 Minutes | Eater